El complejo de pecho es un problema que acompaña a muchas mujeres a lo largo de su vida. ¿Soluciones frente a ellos? Existen muchas y distintas como veremos a continuación.
Lo importante de esto en primer lugar, es que hay que te tener claro que cada mujer es diferente. Su anatomía y fisiología será particular, y no por ello más despreciable. Si padeces de complejo de pecho, es importante que te aceptes tal y como eres.
Tienes todo el valor del mundo como persona, y los demás deben verte como tal. Por ello, tener el pecho más pequeño o más grande de lo normal no es algo de lo que avergonzarse.
Si bien es verdad, que una vez superado el complejo de pecho, la mujer puede sentirse con ganas de aumentar un poquito más su tamaño, a través de las distintas técnicas existentes, bien a través de grasa o prótesis. Consiguiendo un resultado muy natural, que le ayude a sentirse más satisfecha y segura con su aspecto físico.
En otros casos, puede ser necesario recurrir a una reducción mamaria para reducir las molestias típicas de mamas grandes, como dolores de espalda, incomodidad a la hora de practicar ejercicio físico, problemas con el sujetador, etc.
Así mismo, también existen mujeres con complejo de pecho a causa de su forma. Las mamas tuberosas o ciertas malformaciones, pueden provocar serias secuelas psicológicas en cuanto a la seguridad personal de la mujer, que aunque para muchas pacientes pase totalmente desapercibido, este problema tiene una solución directa.
La mastectomía tras haber padecido un cáncer, puede convertirse en un trauma que llega a destruir la vida de la mujer que la padece. Sin embargo, la reconstrucción mamaria es una técnica a la orden del día, que ha mejorado la calidad de vida y la satisfacción de las pacientes.
¿Complejo de pecho? ¡En absoluto! Disfruta de ser tú misma.
