En Biyó contamos con los mejores profesionales de la Otoplastia en Alicante, con el fin de corregir esos pequeños defectos provocados por las orejas desplegadas o en asa, a través de una cirugía sencilla y ambulatoria.
Las orejas en asa pueden ser motivo de pérdida de autoestima
Aunque en muchas ocasiones se evite hablar de ello, este tipo de alteración suele condicionar la vida del paciente desde su niñez, coartando su forma de ser y trasladando su carácter al de una personalidad controvertida, y con más dificultad de relación.
Los trucos para minimizar el efecto visual son varios. Cintas del pelo, adhesivos, peinados voluminosos… No obstante, este tipo de soluciones rápidas no terminan por mejorar la calidad de vida del paciente, y que en algunos casos, solo agravan la inseguridad y la preocupación.
La niñez es una de las mejores etapas para practicar la Otoplastia
El aspecto de orejas desplegadas se debe a un defecto del plegamiento de un tipo de cartílago, conocido como antehellix, que está localizado en la oreja. Esta es la causa de que finalmente, el pabellón quede plano y un poco más separado de la cabeza, dando la impresión de orejas abiertas y grandes.
Aunque puede recurrirse a su corrección por cirugía a cualquier edad, la etapa recomendada comprende los 6 años, por la mayor plasticidad de la estructura cartilaginosa, que permite resultados más exitosos.
Además, la entrada en el colegio suele ser uno de los momentos más difíciles para estos niños, que se ven rechazados por los compañeros a través de las burlas y risas.
Biyó practica la otoplastia en Alicante con total profesionalidad y servicio
Nuestra clínica está especializada en este tipo de intervenciones, ofreciendo unos resultados óptimos y satisfactorios.
Sin necesidad de complejos procedimientos, tan solo es necesario recurrir a una incisión cutánea en la zona posterior del pabellón para desplegar la piel de la zona, y conseguir visibilidad del cartílago. Finalmente, se procede a su remodelación y al cierre de la sutura.
Para ello, solemos realizar la intervención bajo sedación intravenosa y anestesia local (excepto en niños menores de 8 años donde se recomienda anestesia general).
En el mismo día del procedimiento, el paciente puede volver a su hogar y proseguir con su ritmo diario. Tan solo será necesario permanecer con el vendaje, administrar antiinflamatorio (alrededor de 3-4 días) y realizar la cura con un desinfectante tipo betadine.
A los 20 días se realiza un control por consulta y una revisión final a los 3-5 meses para valorar que todo sea satisfactorio.
Desde aquí puede acceder a nuestra sección de preguntas frecuentes sobre otoplastia en Alicante, con más información.
