Es importante destacar, que existen distintos tipos de carcinoma de piel en función del tipo de células afectadas, su agresividad, e incluso, no debemos olvidar la presencia de pequeñas alteraciones benignas.
Dentro del cáncer de piel se encuentran dos grupos de tumores bien distintos, el grupo de los melanomas y el grupo de tumores basocelulares y escamosos.
El primer grupo está formado por tumores de mediana y gran agresividad que son capaces de dar metástasis a distancia (diseminación) y acabar con la vida del paciente.
Pero lo que nos ocupa hoy son más los tumores del segundo grupo, los carcinomas basocelulares y espinocelulares.
Estos dos tipos de tumores son denominados pseudobenignos porque tienen un comportamiento más local y con muy pocas posibilidades de dar diseminaciones a distancias, aunque los espinocelulares si pueden darlas.
El sol como causa de muchos tipos de carcinoma de piel
La importancia que adquieren es por su origen en el daño solar de la piel y/o pequeños actos de traumatismos repetidos como por ejemplo en el labio inferior de los fumadores.
La acción lesiva del sol sobre la piel está mostrando cada vez más importancia debido al aumento del número de casos de estos tumores y con su presencia cada vez en edades más tempranas.
Hace 20 años era difícil ver estos tumores en gente menor de 60 años, pero hoy día los vemos frecuentemente en personas de menos de 30 años. La razón es la falta de protección solar frente a un sol que cada vez nos resulta más dañino por la fractura de la capa de ozono, siendo capaz de provocar distintos tipos de carcinoma de piel.
La protección solar es fundamental frente al cáncer de piel
En la consulta solemos preguntar al paciente si toma el sol y siempre responden que no, pero que de jóvenes si que lo tomaron mucho; es el caso común, quemaduras solares cada verano y exposición sin protección durante largos años, que la piel con su carácter de memoria o recuerdo, ha ido acumulando y que pronto o tarde se van a manifestar como tumores de la piel.
Normalmente se observa una pequeña ulcerita en la nariz, o la mejilla o las orejas o bien en el labio, que no cura con ninguna pomada, y que cada vez se hace mas grande. En otras ocasiones se presenta como una pequeña verruguita sobreelevada, endurecida, con puntos blanquecinos en su superficie (perlas).
El tratamiento de estas lesiones en la mayor parte de los casos es la extirpación quirúrgica. Normalmente se diagnostican cuando son pequeños, por lo que no requieren más que una pequeña cirugía con anestesia local.
Esto es suficiente para curarlos y que nunca mas vuelvan a reaparecer. En los espinocelulares, en ocasiones en necesario asociar una limpieza de los ganglios linfáticos (vaciamiento ganglionar) de la zona de drenaje para asegurar que se eliminan las posibles células que pudieran haberse diseminado.
Pero lo realmente importante es la prevención y cada vez la vamos a necesitar más. Hoy día no se puede permitir a la población que repetidamente acabe con quemaduras solares en la playa por exceso de sol. No es conveniente tomar el sol de las horas centrales del día, ni tan siquiera en invierno, sin llevar puestas cremas de protección solar o bien medios físicos de protección como sombreros o pañuelos.
Debemos enseñar a los niños que estas medidas son imprescindibles para preservar la piel en buenas condiciones de cara al futuro. Desde la niñez hay que proteger a diario a estos niños. Las gorras y las cremas serán sus aliadas si se quiere prevenir el cáncer de piel.
Si tiene cualquier duda más acerca de los tipos de carcinoma de piel, consúltenos.